Hidalgo
Por la Redacción
Tulancingo, Hidalgo.- Las autoridades competentes determinarán si es una parafilia o alguna otra enfermedad mental la que padece el octogenario Joaquín Soto Marroquín, al vivir con su hermana, ya muerta, durante aproximadamente 8 meses.
El ancianito, trascendió, se acostaba en la misma habitación, pero en otra cama, la cubría perfectamente, le cambiaba sus cobijas, y hasta le colocaba su ropa y calzado a un lado, como si fuera a ocuparlos.
Sin duda, raro que haya acontecido en Tulancingo. Es un hecho histórico en el Estado y hasta en el país entero.
Para especialistas en la materia, es una conducta totalmente patológica.
A decir de médicos del Hospital General, el hombre pudiera padecer un serio trastorno psicológico dentro de las parafilias, o cualquier otro daño.
En el nosocomio dijeron ser respetuosos de lo que determinen las autoridades y accedieron a dar algunas connotaciones de lo que posiblemente sucedió.
LAS PARAFILIAS, RARAS ATRACCIONES
De las parafilias se derivan una serie de enfermedades, poco más de 70, entre las que destacan: Hipnofilia, que es contemplar a personas dormidas; Hifefilia, poseer objetos ajenos.
La más común, la Necrofilia: Atracción sexual por los cadáveres.
También hay Biofilia, que, aunque el término se refiere a "amar la vida", si fuera ésta la aplicación en el caso, y de determinarse a través de estudios psiquiátricos, tal vez el hombre que dormía con su hermana en esta ciudad, "la contemplaba a ella como viva", dijeron en el nosocomio.
Apuntaron que el psicoanálisis de Erich Fromm pudiera ser muy asertivo para determinar qué pasaba por la mente de quien fue descubierto, la noche de este jueves, "viviendo con su hermana fallecida".
"Tal vez el señor pudo haber tenido una fijación simbiótica; le hizo falta amor de su madre, y a cambio la sustituyó por su hermana que, aunque muerta, estaba con él".
De ser así, ya no tiene una percepción adecuada; posiblemente creía que estar con ella, le daba seguridad y ganas de seguir viviendo, exteriorizaron.
CONTADOS CASOS EN EL MUNDO
En Internet, pueden encontrarse contados casos, similares al acontecido en Tulancingo, Hidalgo.
Por ejemplo, en enero del 2010, en San Martín de Valdeiglesias, España, se hizo un hallazgo similar y macabro.
Las autoridades de aquel lugar detectaron que una familia taiwanesa vivía con tres cadáveres.
Pero no sólo en este sitio, en Viña del Mar, Chile, una mujer vivió durante 6 meses con su esposo, ya fallecido.
Son acontecimientos inusuales y por demás patológicos, como lo que sucedió en el 2009, cuando se descubrió a un hombre vietnamita, quien presuntamente desenterró el cuerpo de su esposa.
Durmió con ella, a su lado. Era tanto su dolor, que no soportaba estar sin ella. Quería abrazarla por siempre.
El hecho es que habrá de investigarse qué enfermedad mental pudiera afectar a don Joaquín Soto, quien dormía con el esqueleto de la que fue su hermana, en pleno centro de Tulancingo.
Sin duda, un hecho insólito.
Joaquín Soto Marroquín, el ancianito que vivió por meses
con el cadáver de su hermana, por Ley, no puede ser acreedor a algún delito.
Foto: El Sol de Hidalgo.
El Sol de Hidalgo
4 de septiembre de 2011Por la Redacción
Tulancingo, Hidalgo.- Las autoridades competentes determinarán si es una parafilia o alguna otra enfermedad mental la que padece el octogenario Joaquín Soto Marroquín, al vivir con su hermana, ya muerta, durante aproximadamente 8 meses.
El ancianito, trascendió, se acostaba en la misma habitación, pero en otra cama, la cubría perfectamente, le cambiaba sus cobijas, y hasta le colocaba su ropa y calzado a un lado, como si fuera a ocuparlos.
Sin duda, raro que haya acontecido en Tulancingo. Es un hecho histórico en el Estado y hasta en el país entero.
Para especialistas en la materia, es una conducta totalmente patológica.
A decir de médicos del Hospital General, el hombre pudiera padecer un serio trastorno psicológico dentro de las parafilias, o cualquier otro daño.
En el nosocomio dijeron ser respetuosos de lo que determinen las autoridades y accedieron a dar algunas connotaciones de lo que posiblemente sucedió.
LAS PARAFILIAS, RARAS ATRACCIONES
De las parafilias se derivan una serie de enfermedades, poco más de 70, entre las que destacan: Hipnofilia, que es contemplar a personas dormidas; Hifefilia, poseer objetos ajenos.
La más común, la Necrofilia: Atracción sexual por los cadáveres.
También hay Biofilia, que, aunque el término se refiere a "amar la vida", si fuera ésta la aplicación en el caso, y de determinarse a través de estudios psiquiátricos, tal vez el hombre que dormía con su hermana en esta ciudad, "la contemplaba a ella como viva", dijeron en el nosocomio.
Apuntaron que el psicoanálisis de Erich Fromm pudiera ser muy asertivo para determinar qué pasaba por la mente de quien fue descubierto, la noche de este jueves, "viviendo con su hermana fallecida".
"Tal vez el señor pudo haber tenido una fijación simbiótica; le hizo falta amor de su madre, y a cambio la sustituyó por su hermana que, aunque muerta, estaba con él".
De ser así, ya no tiene una percepción adecuada; posiblemente creía que estar con ella, le daba seguridad y ganas de seguir viviendo, exteriorizaron.
CONTADOS CASOS EN EL MUNDO
En Internet, pueden encontrarse contados casos, similares al acontecido en Tulancingo, Hidalgo.
Por ejemplo, en enero del 2010, en San Martín de Valdeiglesias, España, se hizo un hallazgo similar y macabro.
Las autoridades de aquel lugar detectaron que una familia taiwanesa vivía con tres cadáveres.
Pero no sólo en este sitio, en Viña del Mar, Chile, una mujer vivió durante 6 meses con su esposo, ya fallecido.
Son acontecimientos inusuales y por demás patológicos, como lo que sucedió en el 2009, cuando se descubrió a un hombre vietnamita, quien presuntamente desenterró el cuerpo de su esposa.
Durmió con ella, a su lado. Era tanto su dolor, que no soportaba estar sin ella. Quería abrazarla por siempre.
El hecho es que habrá de investigarse qué enfermedad mental pudiera afectar a don Joaquín Soto, quien dormía con el esqueleto de la que fue su hermana, en pleno centro de Tulancingo.
Sin duda, un hecho insólito.
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